Jessica Buznick es médica neurocirujana graduada con honores en la UBA y Matías Hutin estudió sistemas, es licenciado en administración y fundó una empresa de tecnología. Ambos motivados por la alimentación saludable tenían el deseo de emprender juntos y en 2020 le dieron forma al proyecto Vivaz Orgánico, un club de vinos enfocado en hacer llegar al público este tipo de productos diferenciados.
“El interés por comer mejor empezó cuando Jessica quedó embarazada de nuestro primer hijo. Queríamos hacer algo con ese tema y pensamos en los vinos porque somos muy consumidores y si bien en Capital veíamos un boom de tiendas naturales, no veíamos tanta oferta de vinos orgánicos. Además, hay muchas fincas que tienen prácticas naturales, pero que no cuentan con certificación, y nosotros queríamos incorporarlos también”, explica Martín
Bajo el formato de startup, lanzaron el mínimo producto viable (MVP) realizando pruebas entre amigos y en poco tiempo sumaron algunas decenas de suscriptores. “En tres meses triplicamos los socios y logramos una demanda genuina. Ahí empezamos a armar el plan de comunicación y pudimos escalar fácilmente porque teníamos bien pensado la parte de operaciones”, menciona el emprendedor y agrega que el crecimiento del interés por la sustentabilidad y la alimentación consciente colaboró también en el despegue de la empresa.
El club de vinos orgánicos trabaja con más de 14 bodegas y 70 productores orgánicos. Su público está conformado por quienes buscan sumarse al movimiento de alimentación sustentable. Martín señala “Nos eligen porque estamos alineados a sus valores alimentarios. Además, el vino es una buena puerta de entrada para la transición alimentaria”, explica el cofundador del club que ya tiene 850 suscriptores y aspira a llegar a los 10.000 en los próximos tres años.
Los usuarios se suscriben de manera online y reciben mensualmente en su domicilio una caja con botellas seleccionadas de bodegas o fincas orgánicas asociadas a la plataforma.
Además, están trabajando en un acuerdo con la fundación ReforestArg para plantar un árbol por cada nuevo suscriptor. El foco para el negocio está en fortalecer su presencia en el interior del país e incrementar las experiencias adicionales, como viajes para conocer en persona a los productores. A largo plazo, se animan a proyectarse regionalmente.